¿Qué Hacemos?

El llamamiento nace en el Señor y por causa de Él se inicia la iglesia trina “Cristo ES”, recibiendo de parte del Señor el siguiente mensaje:

 Isaías 58:12 Reina-Valera 1960

Y los tuyos edificarán las ruinas antiguas; los cimientos de generación y generación levantarás, y serás llamado reparador de portillos, restaurador de calzadas para habitar.

Este ministerio tiene condiciones muy definidas de profundidad bíblica y por causa de Dios se nos demanda la separación con el mundo y permanecer marginados de las cosas carnales, de lo que el mundo ofrece y de las cosas diabólicas.

En el principio Dios nos permite a un grupo pequeño de personas reunirnos para tener en común nuestra Fe y trabajar arduamente edificando su iglesia, construyendo una forma de trabajo con el fin de solucionar todas las necesidades que en ese momento abocaba y que eran de muy difícil resolución, lo cual no se conseguiría solucionar si no había un trabajo arduo. Para ese entonces se tenía un programa radial en una emisora cristiana que se mantuvo durante doce años, los primeros años fueron sacados del peculio para pagar el deber adquirido. 

En ese entonces el Señor me habla (Laurentino López) y me dice que es necesario tener recursos propios para sostener la obra, y me indica que debía constituir una empresa de tamales, sin embargo yo no tenía las cualidades que se requerían para este propósito, no tenía el conocimiento de cómo fabricar tamales, recetas, materia prima y mucho menos de los elementos para fabricarlos, ni por la mente se me había ocurrido jamás pensar en esto y por lo tanto tenía un desconocimiento absoluto, pero lo más interesante es que este producto no eran de mi agrado, solo lo había consumido muy esporádicamente; sin embargo tratándose de un llamado del Señor, por la Fe seguí adelante y empecé a indagar con los hermanos de la congregación, quienes se unieron y traían ideas de recetas y demás cosas para la fabricación, así es como empieza el Señor a armar un grupo de trabajo para esta obra, como resultado de esta labor sale la primera producción que fue la peor jamás vista que se pudiera haber fabricado, reflejando ese desconocimiento total, a esto se adicionaba que las personas que colaboraban no eran constantes y se cambiaba constantemente de personas y recetas.

Sin embargo, el Señor me permitió persistir con grandes pérdidas inicialmente, pero con clientes muy grandes entre ellos los propios hermanos en la fe y yo junto con mi familia, empezaron a haber ventas que trajeron ganancias, de esta manera empezamos el aprendizaje y a sostenernos.  Luego viene la ordenanza del Señor de implantar una cooperativa alimentaria basada en la venta de café o tinto con pan, el inicio de lo que sería la cafetería, al unísono se fueron levantando estas dos cosas formándose una base de ahorro financiero con la cual el Señor me indica que debía empezar a pagar el programa radial, y a partir de ese momento ya no tenía yo la responsabilidad de pagar el programa radial sino que a través de ese trabajo el Señor asumía el pago con la venta de los tamales y la cooperativa, esta fue la solución que Dios nos había dado, y con el tiempo se fue mejorando constantemente en la calidad de la fabricación y poco a poco se fueron superando los errores.

Con la fábrica andando y manejando muy bien los recursos, el Señor nos permite la compra de unos pequeños terrenos, para que dado el momento se establecieran las iglesias donde el Señor se glorificaría, fortaleciendo el ministerio y su doctrina. Estos sitios eran de gran importancia porque el Señor permite la enseñanza y el conocimiento bíblico a los hermanos en la Fe, lamentablemente muchos de ellos no entendieron ese llamado bíblico teniendo la oportunidad de crecer de forma práctica y teórica, no alcanzaron la suficiente madurez, y vemos que se cumple la palabra de 1 Timoteo 3:6 “en nosotros, dado que todos eran neófitos y cayeron en condenación del diablo trayendo desespero y dificultades”; sin embargo, se comenzó a implantar  la venta de tamales en cada lugar junto con los demás productos que empezaron a preparar cada iglesia, perfeccionando los mismos con nuevas recetas, y nuevas alternativas, empeñados en contribuir con la venta, y el incremento del producto. Este sistema de sostenimiento se volvió indispensable para sostener cada iglesia, incluso aquellos templos donde solo se tenía el sitio de adoración, pero sin medios para vivienda, pudiendo cubrir los arriendos, servicios, alimentación, y bonificaciones a las personas que venden los productos, ayudándoles a resolver sus necesidades personales, bendiciendo la obra y siendo bendecidos ellos mismos.

Todo esto se lleva como un llamado creado, hecho y dependiente de Dios, a pesar del vituperio por parte de las personas que no entendieron el ministerio, el Señor nos ha sostenido por muchos años.

A través de lo que hemos vivido vemos que El Señor nos dio un ministerio de trabajo, negando que no siempre las bendiciones se logran a través de ofertas en un evangelio de subasta, un evangelio leudado que aprovechándose de la codicia en el corazón de los que están al frente y de los que los acompañan, crean posibilidades de ser ricos con poco esfuerzo y recibir muchas bendiciones a través de grandes inversiones.

La visión y propósito del trabajo que el Señor ha dado a esta iglesia Trina “Cristo ES” ha sido asumido y llevado a cabo como muy pocas iglesias en Colombia lo harían, con la fabricación y venta de productos como tamales, empanas, arroz con leche, habas, maní salado y dulce entre otras muchas cosas, lo cual se seguirá realizando hasta que el Señor lo permita, liderado por los pastores y levitas de cada iglesia los cuales son los que ayudan a sustentar la obra por medio de su trabajo,  pero que al mismo tiempo se preparan espiritualmente con enseñanzas teológicas, hermenéuticas, Homiléticas entre otras para generar liderazgos dentro de la iglesia con grandes oportunidades de crecimiento.

Actualmente el trabajo de la fabricación y venta de empanadas es lo que sustenta todos los gastos que conlleva tener la emisora online Encaminame Radio, una emisora que el Señor nos dio como promesa y que a través del tiempo lo ha convertido en una realidad, no por obra del hombre sino por gracia, sin costo para la iglesia porque todo fue donado junto con la mano de obra de Pastores que el Señor coloco con el fin de difundir su evangelio.

Dios quiere un pueblo esforzado y valiente. Los diezmos son bíblicos claro que sí, pero con este recurso que el Señor nos da, se realiza la obra evangelizadora misionera, visitando diferentes lugares y llevando respuestas a Pastores y hermanos en la Fe.

Dios estableció este principio para todos aquellos que creen en su nombre, los que se han establecido por la Fe en la labor que se nos ha dado; muchos de los que han estado por años están firmes y nos han acompañado trabajado sin escatimar esfuerzos, para que Dios se glorifique a través de este trabajo y permanezca su obra.

Todo esto finalmente es para cumplir Isaías 58:12 El propósito de la iglesia trina “Cristo ES” es restablecer las personas que vienen caídas, desesperadas, agobiadas por el pecado, con maldiciones generacionales desde la primera hasta la cuarta y de la quinta hasta la décima  generación, Dios las pone en nuestras manos con un cuidado atento y permanente, ya que estas personas requieren de muchísima doctrina y conocimiento bíblico para lograr los objetivos que Dios ha establecido, por tanto estos principios se llevan a las personas. La iglesia trina “Cristo ES” da un pequeño resumen de la obra que Dios estableció, llevándola en cada lugar que Dios ha abierto durante los 25 años que lleva trabajando y seguramente en los que seguirá abriendo.

El enemigo nos ataca con muchas personas y de muchas maneras para derribar esta obra, porque no le gusta el trabajo que llevamos, pero Dios siempre ha salido vencedor y me ha guiado para tomar decisiones muy radicales, dado que aun algunos miembros y líderes, han tratado de acabar con este principio de trabajo, creando nuevas formas y hábitos que están sustentadas por sus razones, las cuales se encuentran leudadas, pero Dios no lo ha permitido, y mientras Dios siga  sustentando este ministerio con la fabricación de tamales y demás productos, seguiremos adelante demostrando la gloria del Señor, y una forma de demostrarlo es la obra que se ha venido realizando en  Villa de Leyva, lugar de dos hectáreas de terreno, que se han tenido que adaptar desde cero ya que este terreno estaba escarpado, lleno de maleza y sin ninguna adecuación.  Allí se inició con la creación de una ciudadela de viviendas para todos los trabajadores que en su tiempo la ocuparan. Esta gran construcción está a punto de terminarse, una obra magna que el Señor nos ha permitido llevar con unos cuantos comprometidos, con dedicación y mucho esfuerzo y sobre todo mucha Fe, los comprometidos han dispuesto sus vidas y han permitido que Dios sea glorificado.

Nuestra esperanza esta en Cristo y su palabra, reconociendo que nuestra recompensa es celestial. Colosenses 3:23-24, 1 Corintios 15:58.

Este es un pequeño recuento de la obra y la ordenanza que el Señor ha creado, y que me permite ponerla al servicio a todos aquellos que sean llamados por la Fe, para mostrarle al mundo un ministerio de trabajo, en el nombre maravilloso de Cristo Jesús. Amén. 

Con la fabricación y venta de nuestros productos se sostienen todas las iglesias de nuestro ministerio (construcción, arriendos, servicios, alimentación etc.), se sostiene también nuestra emisora online y la obra en la ciudad de villa de Leiva. Si deseas apoyarnos a continuación encontraras una presentación de todos nuestros productos, en diferentes ciudades de Colombia, apóyanos haciendo tu pedido, con ello ayudas a la misión y visión de este ministerio, y serás bendecido, bendiciéndonos.